Alcalá de Henares también enriquece su gastronomía con la llegada de la Semana Santa. A sus tradicionales postres típicos como la costrada, almendras o rosquillas, se suma otro manjar como son los “Penitentes”. Se trata de un barquillo cónico, lo más parecido a un capirote de un penitente, y relleno de crema de diferentes sabores.
Por supuesto, tampoco en Alcalá se olvidan el hornazo, las torrijas, los buñuelos o los huevos de Pascua.
Pero a la gastronomía también hay que unir numerosos protagonistas que, sin ellos, tampoco existiría una Semana Santa tan importante. Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Policía Nacional, Local, Brigada Paracaidista (BRIPAC), Emergencias, 112, Protección Civil, Ejército, técnicos y operarios municipales que suman al esfuerzo común de ciudadanos anónimos, Corporación Municipal, Hermandades y Cofradías para que todo salga a la perfección.
Y por supuesto, la labor previa desde el Obispado para poder coordinar un trabajo que ponen en valor los medios de comunicación. Fotógrafos, Cámaras, Radios, medios en internet, Televisiones, Podcast especializados, y un sinfín de agradecimientos que hay que destacar por reflejar, cada uno a su manera y con su estilo propio, la Semana Santa de Alcalá de Henares.
Por eso, por ese esfuerzo común de todos, está declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional.
